En el centro de este libro hay una conversación abierta. Esa conversación transcurre a través de pasajes, fragmentos, archivos, anécdotas y notas sueltas que el autor va entretejiendo con el fin de presentar un panorama general de las diversas relaciones entre la vida y las artes visuales en el Chile que va desde los animados años sesenta a los de la última década del siglo XX. Lo que aquí se cuenta es la historia, discontinua o arremolinada, acerca de cómo fue mutando la vida y la comprensión de ésta al interior de un proceso artístico en permanente estado de transformación. Se trata de una historia hecha de historias, donde los sueños vanguardistas de la época de la Unidad Popular se cruzan con el despertar apesadumbrado que siguió a los primeros años del Golpe o con las formas experimentales del arte de los noventa.

Los hechos o anécdotas son aquí personajes que cobran una forma novelada y se suceden en un juego de luces y sombras, remotos y próximos a la vez.